lunes, 7 de marzo de 2016

¡Con la ayuda de los animales!

Trabajar la estimulación del Lenguaje con niños y niñas muy pequeños, siempre es mucho más fácil, divertido, y estimulante, cuando nos ayudamos de los animales.

Y es que una de las bases para que el lenguaje se desarrolle de forma adecuada, es decir el pre-lenguaje o los pre-requisitos del lenguaje, son las onomatopeyas.

Jugando con los peques, podemos hacer todo tipo de sonidos, desde el sonido que hacen los transportes, como el coche, el tren,… hasta el sonido que hacen los animales, o nuestro propio cuerpo.


Con los animales tenemos una ventaja añadida, y es que a la mayoría de los peques les encantan! Ya sean animales de granja, domésticos, de la selva,… se lo pasan de maravilla imitando esos sonidos, y así jugando estamos estimulando el desarrollo y adquisición del lenguaje, desde antes del añito de edad. Con esta edad, nosotros podemos ir cogiendo cada animal, y junto a los movimientos del cuerpo, imitar el sonido de cada animal, darle nombre al animal, para que relacionemos el léxico junto al sonido que realiza.

Se puede trabajar más adelante no sólo imitando el movimiento y el sonido, sino jugando con ellos, con los animales de juguete por ejemplo, o con animales de dedo, o con cartas buscando su pareja. Jugaremos a encontrarla, haremos el sonido, y una frase de una y de dos y tres palabras sucesivamente según la edad. En este sentido, lo que les va a gustar más son los cuentos. Hay muchísimos cuentos sobre animales, y además de esta manera también fomentamos la lectura, el mismo lenguaje, el uso del espacio,…¡¡una maravilla!!
Además, trabajaremos también las posiciones de los labios, las praxias orofaciales, diciendo el primer sonido de la palabra que da nombre al animal. Es decir, trabajamos los fonemas, que son los que el niño va a utilizar para hablar y expresarse. 

Por ejemplo “foca” haremos el sonido que hace la foca, la buscaremos en tarjetas o en el juguete del animal, jugaremos con ella, podremos ir diciendo no sólo su nombre, sino también sus características (cómo tiene el pelo, donde vive, donde están sus bigotes,…) señalando además en mi cuerpo y en el suyo cuando hablemos de cada parte, o con los animales de dedo o los cuentos, así como poner la forma de la praxia o posición de los labios y de la boca,con el sonido /F/ FFFFFFFFFF, además soltando el aire adecuadamente.

Esto último lo podemos hacer desde ir soltando el aire en la mano del peque, y luego el peque que lo intente en nuestra mano, hasta mirando en el espejo cómo debemos poner la boca, los dientes y los labios.

¡¡Ellos lo pasan genial y sin darse cuenta están trabajando el desarrollo del lenguaje!!

Y además, da para hacer tantísimas actividades que desde luego es una fantástica herramienta: podemos hacer una granja con cartulina, hablamos sobre ella, para qué sirve, qué hay dentro,… y podemos ir haciendo los animales con plastilina (nos da la posibilidad de hacer una actividad previa) e ir metiéndolos en la granja, si es que viven allí!

También, cuando los niños son más mayores podemos situar los animales en el mapa.

Y es que….¡¡¡los animales nos echan más de una mano y son divertidísimos!!!


¡Que tengáis una buena semana! 

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